un verdadero espectáculo

La modalidad Final 4 para la definición de la Champions League demostró ser un acierto absoluto por parte de la Federación Europea.
La impresionante cantidad de 40 mil espectadores en dos días es una prueba acabada de ello en un país handbolero como lo es Alemania y en el mismo estadio donde se jugó la final del Mundial 2007 que ganaran los locales.


20 mil personas vieron la final del Final 4.

A pesar de las quejas que se escuchan en España sobre que era seguro que el campeón fuera un equipo alemán (bien quedó demostrado en el Mundial 2007), la final tuvo un arbitraje excelente y para nada localista. Y en semifinales, los errores fueron para ambos lados, aunque siempre queda en la retina lo ocurrido en los segundos determinantes.
Lo que quedó bien claro fue que Alemania sabe disfrutar del handball y sabe cómo organizarlo y hacer de él un espectáculo atractivo. Prueba de ello fueron la final de la Supercopa Alemana 2004, cuando Lemgo y Kiel jugaron en la adaptada cancha de fútbol del Schalke 04 ante poco más de 30 mil espectadores, lo que es un récord de asistencia en el handball; y también lo demostraron en el Mundial 2007, prolijo por donde se lo mire.
El Final 4 llegó para quedarse y, ojalá, sea igual de vibrante como lo fue la edición 2010, en la que festejó el THW Kiel.


Récord de asistencia: 30 mil personas en una cancha de fútbol.